ANESDOR, la Asociación Nacional de Empresas del Sector Dos Ruedas, y PONS Seguridad Vial, empresa líder en consultoría estratégica pública y privada de movilidad, han reunido a distintos expertos y representantes del sector dos ruedas para debatir sobre el papel de la moto en la movilidad de las ciudades y la seguridad de los motoristas. Bajo el título Motos que mueven ciudades, la jornada se ha desarrollado en el marco del Salón Vive la Moto en IFEMA, que abre sus puertas desde hoy hasta el próximo domingo 8 de abril.
El encuentro ha contado con la participación de expertos de la Dirección General de Tráfico (DGT), así como de otros organismos de referencia en el ámbito de la movilidad y la seguridad vial como los ayuntamientos de Madrid y Barcelona y la Organización Empresarial de Logística y Transporte, UNO.
La inauguración de la jornada ha corrido a cargo del patrono de la Fundación Pons y ex director de la DGT, Pere Navarro, y del presidente de ANESDOR, César Rojo, quien ha señalado las ventajas de movilidad que presenta la moto frente a otros vehículos motorizados. Por su parte, Navarro ha destacado que “el éxito de las políticas de movilidad en nuestras ciudades con la consiguiente reducción del uso del automóvil nos está llevando hacia las motocicletas, pero hoy siguen siendo las grandes olvidadas en las políticas de movilidad y de seguridad vial. Diez años después de la aprobación del Plan Estratégico de Seguridad Vial de Motos y Ciclomotores que fue un referente en Europa, llega el momento de abordar su revisión y actualización”.
En ese contexto, el patrono de la Fundación Pons ha señalado que “las ciudades deberían plantearse la creación de las «oficinas de la motocicleta» o del responsable de la moto con un funcionario que sea motociclista al frente, para darles a las motos la importancia que tienen y merecen en la seguridad vial. Por último, la formación de los motoristas es un tema crucial. Reclamamos la incorporación de un mínimo de horas presenciales de seguridad vial para sacarse el permiso de conducir, hoy este tema sigue siendo una asignatura pendiente”.
En ese sentido, el director general de la DGT, Gregorio Serrano ha afirmado que “la DGT es consciente de que los motoristas son uno de los colectivos vulnerables y por tanto prioritarios en las intervenciones a realizar. Anuncié a principios de año nuestro compromiso de poner en marcha medidas y de dicho compromiso lanzamos en Semana Santa la campaña “El Hombre de Cristal”, una campaña de sensibilización dirigida a todos los usuarios de la vía sobre la fragilidad de los motoristas en carretera. Esta campaña ha sido sólo un adelanto del Plan SEGURMOTO -Plan especial para la mejora de la Seguridad Vial de los Motoristas- que presentaremos dentro de unos días y que incluye más de una treintena de medidas agrupadas en cinco áreas de actuación (educación y formación; comunicación; la norma y su cumplimiento; seguridad en el vehículo y protección del usuario y actuaciones sobre la infraestructura) con las que pretendemos reducir la accidentalidad de este tipo de usuarios”.
Con nueve ponencias, divididas en tres bloques, el encuentro ha abordado de forma global los retos a los que se enfrenta la moto y otras cuestiones de actualidad como la sostenibilidad ambiental, el marco regulatorio de las dos ruedas en el contexto de las ciudades, así como iniciativas destinadas a reducir la siniestralidad de un colectivo vulnerable como es el del motorista.
El secretario general de ANESDOR, José María Riaño, ha destacado «la importancia de celebrar este tipo de jornadas que permiten poner a la moto en el centro del debate de la movilidad y, en paralelo, favorecen la búsqueda de sinergias entre los distintos actores del sector”. Riaño ha señalado asimismo que «cinco millones de españoles eligen la moto como su medio habitual de desplazamiento, principalmente, por las ventajas de movilidad que presenta frente a otros vehículos y por ser más económico. Por ello, y por los beneficios en términos medioambientales, en tanto que contamina menos que otros vehículos motorizados, la administración local debe favorecer su uso con políticas inclusivas en los diferentes planes de movilidad”, ha precisado el secretario general de ANESDOR.
Por su parte, el asesor de PONS Seguridad Vial, Ramón Ledesma, ha afirmado que «el objetivo del ciudadano en su desplazamiento urbano diario se realiza en virtud de dos principios: dedicar el menor tiempo con el menor coste posible. Las restricciones medioambientales a los turismos y un transporte público que aún no es suficientemente óptimo están provocando un aumento exponencial del uso de la motocicleta y el ciclomotor. Las ciudades no deben rechazar la motocicleta, sino trabajar para ordenarla, gestionarla y garantizar su seguridad«.
En ese sentido, el gerente de Movilidad y Formación de PONS Seguridad Vial, Francisco Paz, ha destacado que “conocer la dinámica de la moto, saber gestionar la mirada, hacerse visible y vestirse como si fuera a producirse una caída, son algunas de las claves de la seguridad motera. El mayor riesgo de la moto puede ser compensado con técnicas de conducción inteligente, por ello la formación es el principal escudo de los vulnerables. La prioridad formativa es el scooter conducido con el B+3 años, ya que suponen un riesgo 1,5 veces mayor que el resto de motos, y además por su impacto en la seguridad vial laboral, ya que el perfil del accidentado de scooter en ciudad tiene que ver con desplazamientos hacia y por el trabajo”.
El comercio electrónico, palanca de crecimiento en el uso de vehículos de dos ruedas en las ciudades
La generalización del comercio electrónico ha provocado un mayor uso de los vehículos de dos ruedas por parte de las empresas de logística y delivery. Solo en el último año
los canales de venta de empresas y RAB (Rent a Bike) han aumentado un 64,9 y un 181% respectivamente en el caso de los ciclomotores. Así, en el canal empresas se matricularon 4.039 unidades mientras que el de alquiler registró 3.634 matriculaciones.
En ese sentido, el secretario general de UNO Logística, Francisco Aranda, ha apuntado que “la consolidación del comercio electrónico, la recuperación del consumo y los nuevos modelos de ciudad exigen una logística que combine eficiencia, sostenibilidad y competitividad. Para lograrlo, las empresas de logística han optado por la digitalización y la innovación como elementos fundamentales para la distribución en ciudad”. Aranda ha precisado que “el reparto en motos, bicis, andarines e incluso monopatines avanza con fuerza en las grandes ciudades. Desde la patronal de logística UNO estamos trabajando con los principales ayuntamientos con el objetivo de descongestionar las ciudades y reducir la contaminación, pero siempre garantizando el reparto a los comercios y a los ciudadanos, ya que es un servicio fundamental para todos”.
Un decálogo de propuestas para mejorar la seguridad de los motoristas
En el marco de la anterior jornada, organizada por PONS Seguridad Vial y ANESDOR en octubre, ambas entidades presentaron un decálogo de medidas concretas que, en torno a la realidad de la moto en España y de acuerdo al análisis de ASEDOR y PONS Seguridad Vial, deberían ser tenidas en cuenta por las organismos públicos y privados vinculados al ámbito de la seguridad vial en nuestro país.
Entre ellas, destacan la apuesta por que los organismos dedicados a la seguridad vial inviertan en la moto una proporción de presupuestos equivalente a la representatividad de sus víctimas en el tráfico; la revisión y actualización del Plan Estratégico de Seguridad Vial para las motocicletas; el desarrollo de una Ley de Usuarios Vulnerables para hacer un seguimiento especial que haga frente a sus problemas y necesidades; la revisión integral de la política de formación vial que favorezca el reciclaje continuo de las personas en hábitos de conducción segura en moto; y la inclusión de formación para motoristas en los Planes de Riesgos Laborales.